Paraguay hace más de tres décadas se encuentra libre de poliomielitis. Para mantener este logro es importante mantener al día el esquema de vacunación de los niños/as.
Hoy, en el Día Mundial contra la Polio se destaca los esfuerzos mundiales para eliminar la poliomielitis y la importancia de la vacunación para proteger a los niños de esta enfermedad.
Esta fecha, representa también una oportunidad para visibilizar la importancia de todas las madres, padres, encargados, personal de salud y voluntarios, quienes tienen un rol fundamental para que las vacunas contra la polio lleguen a los niños y sus comunidades.
La Región de las Américas fue certificada como libre de poliomielitis en 1994. Desde entonces, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha invitado a los países a sostener altas las coberturas de vacunación y fortalecer la vigilancia para mantener a las comunidades seguras ante el riesgo de un posible evento o brote.
El Ministerio de Salud Pública, a través del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), insta a la población a mantener actualizado el esquema regular de vacunación de los niño/as, a fin de evitar brotes y protegerlos de enfermedades prevenibles por vacunas. Las vacunas están disponibles de forma gratuita en los servicios de salud.
Paraguay libre de polio
En Paraguay desde 1985, el país se encuentra libre de Poliomielitis, esto demuestra que la eliminación de enfermedades prevenibles por vacunas es posible. Para sostener dicho logro se precisa mantener coberturas elevadas de vacunación. En la actualidad seguimos con resultados exitosos a nivel país con un alto compromiso del Equipo Nacional del Programa Ampliado de Inmunizaciones.
El Lic. Luis Cousirat, director del Programa Ampliado de Inmunizaciones refirió “Si bien es cierto la cobertura de vacunación se ha visto gravemente afectada por la pandemia de COVID-19 en la mayoría de los países, y el riesgo de circulación de la poliomielitis nunca ha sido tan elevado desde 1994,seuimos con un monitoreo permanente para no tener ningún tipo de sorpresa, la vacunación contra la polio es muy importante desde la primera infancia a los dos, cuatro y seis meses de vida y que tiene un refuerzo a los cinco años, al ingreso en la escuela primaria”.
Indicó además que las vacunas son una de las intervenciones más importantes en el mundo para prevenir enfermedades, salvar vidas y evitar secuelas”.
La polio es una enfermedad infecciosa que deja secuelas, principalmente a las neuronas motoras que son las que mueven los músculos. De manera más frecuente afecta a los miembros inferiores y causa una parálisis asimétrica, es decir, puede afectar una pierna y a la otra no. Si esto no se revierte en las primeras semanas post enfermedad queda una secuela de por vida”.
Lamentablemente y a nivel general en la última década las coberturas de vacunación mostraron una tendencia decreciente. Así la región de las Américas pasó a ser la segunda con menor cobertura del mundo. Ante esta situación es importante resaltar que el riesgo de brotes de enfermedades prevenibles con vacunas alcanza su nivel más alto en 30 años.
Riesgo de reintroducción
Si bien en 1994 la región de las Américas logró eliminar la transmisión del poliovirus salvaje y los virus salvajes tipo 2 y 3 fueron erradicados, en algunos países como Afganistán y Pakistán continúa siendo endémico el virus salvaje tipo 1.
Además, en un porcentaje mínimo y de manera muy inusual, se puede generar una mutación derivada de la vacuna oral contra la poliomielitis con capacidad de transmitir la enfermedad a personas vulnerables al no estar vacunadas.
Generalmente el virus se transmite de persona a persona, a partir de las heces de un individuo infectado que llegan a la boca de otro a través de las manos, juguetes, agua y alimentos contaminados, o a partir de secreciones respiratorias.
Como una gran proporción de las personas infectadas no presentan síntomas, las medidas de higiene necesarias para evitar la transmisión pueden no ser tomadas en cuenta con la importancia requerida. Por esa razón, la mejor forma de evitar la infección es mediante la vacunación contra la polio.