Cubrirse con la mano o simplemente no hacerlo al momento de toser o estornudar es una práctica que facilita la dispersión de virus respiratorios a través de gotículas que se dispersan en el aire. Estas pueden llegar incluso a contaminar superficies y objetos.
Teniendo en cuenta el pronóstico de lluvias en distintos puntos del país, junto con una ligera disminución de la temperatura, sumado al progresivo incremento de las infecciones respiratorias, se insta a la población a tomar los recaudos para prevenir enfermarse.
Hay que tener en cuenta que la gripe o influenza, al igual que otros virus respiratorios, se transmiten con facilidad de una persona a otra a través de gotículas y pequeñas partículas que son expulsadas con la tos o los estornudos.
Si al momento de toser o estornudar no cubrimos la boca y la nariz, se diseminan secreciones que podrían contener virus respiratorios, en el ambiente, a las personas, así como a las superficies y objetos.
Para impedir que el virus se propague, se aconseja cubrirse siempre la boca y la nariz con el antebrazo o con la ayuda de un pañuelo desechable y nunca con la mano. Si utiliza pañuelo, debe desecharse inmediatamente a un bote de basura luego de uso y seguidamente lavarse las manos con agua y jabón.
Los virus respiratorios también pueden transmitirse por las manos contaminadas y de esta manera contaminar una variedad de objetos, por lo que cubrirse con la mano tras una tos o estornudo no es recomendable.
Para prevenir la transmisión de virus respiratorios
- Cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar es clave. Hacerlo siempre con el antebrazo o flexura interna del codo, o con un pañuelo desechable.
- Lavarse las manos con agua y jabón, de forma correcta y frecuente.
- Mantener los ambientes cerrados ventilados. Abrir puertas y ventanas contribuye a reducir el riesgo de contagios.
- No compartir mate, tereré ni cubiertos.
- Evitar el contacto cercano con personas con síntomas respiratorios, como dar besos, abrazos o pasar la mano.
Ante síntomas respiratorios
En caso de presentar tos, estornudos persistentes, obstrucción nasal, dolores de cabeza, garganta y oídos, aumento de la temperatura corporal, malestar general, acuda a la consulta médica y no consuma medicamentos sin prescripción del especialista, de manera a impedir que el cuadro se complique.